A la altura del Monasterio del Paular y pasando la carretera, nos encontramos con el Puente del Perdón. Cruzando este puente de piedra por encima del río Lozoya y a pocos metros a la izquierda, encontramos el desvío. Un ancho camino de tierra, flanqueado por filas de álamos de troncos bien desarrollados, nos lleva en la buena dirección. Aquí es donde hay que estar atentos al desvío, que unos metros más adelante y de nuevo a la izquierda, nos llevará en la dirección correcta. A pesar de la atención, no es difícil pasar de largo la entrada hacia el lago, que se encuentra “escondido” en el bosque. Aquí es donde os traigo para hacer el reportaje de fotos de parejas en Madrid.